Las membranas de policarbonato son microporosas con una superficie lisa y plana y con poros cilíndricos controlados. La membrana tiene un agente humectante, polivinilpirrolidona (PVP) que permite que sea hidrófila. Los filtros de policarbonato GVS no se tiñen, lo que minimiza la interferencia de fondo. Estos filtros son esterilizables en autoclave con una temperatura máxima de funcionamiento de 140°C (284°F).