DISPENSACIÓN

Para realizar una adecuada dispensación de líquidos se deben utilizar dosificadores y sistemas de bombeo. Los dosificadores son ideales para verter pequeñas cantidades controladas y conocidas. Los líquidos peligrosos nunca se deben verter directamente sino a través de sistemas de bombeo. Para ello se debe seleccionar la bomba adecuada en función del tamaño del bidón y volumen a verter. Las bombas manuales son ideales para recipientes convencionales. Las bombas de pedal se adecuan a ámbitos industriales. Además se debe escoger el material de la bomba según el tipo de líquido: las bombas de polipropileno son para ácidos y lejías y las de acero inoxidable para líquidos combustibles e inflamables.